Los animales normalmente se asean, por ser esta una parte importante de su conducta natural. El auto aseo del ganado lechero puede ser definido como el lamerse en cualquier parte del cuerpo o rascarse en los objetos inanimados circundantes al animal. El aseo es un requerimiento de conducta importante de la vaca y la restricción de tal comportamiento puede ser estresante, conduciendo a conductas anormales.
La función principal del aseo es cuidar el cuerpo, mantener la piel limpia y disminuir el riesgo de enfermedades. El auto aseo del ganado lechero incluye lamerse con la lengua, rascarse con las patas traseras y astas (si las tuviese), así como con el movimiento de su cola. Sin embargo, para poder alcanzar partes inaccesible como la cabeza, cuello, espalda y cuartos traseros, el ganado necesitará hacerlo en algún objeto inanimado. En sistemas de producción a pastoreo, al ganado le gusta utilizar objetos ambientales para rascarse como árboles y cercos, especialmente para áreas del cuerpo no tan accesibles para la lengua y patas.
Durante la década del ochenta, comenzaron a desarrollarse los primeros prototipos de cepillos mecánicos giratorios para vacas con la finalidad de facilitar esta conducta normal de aseo y acicalamiento en los animales de lechería. A continuación se describen los beneficios obtenidos al utilizar estos cepillos para vacas.
Beneficio 1: Mayor Bienestar animal
Un cepillo mecánico para vacas es un ejemplo de un enriquecimiento ambiental que permite que el ganado realice su conducta de aseo, permitiendo disminuir su estrés. Estos cepillos facilitan el aseo, en particular en partes del cuerpo de difícil acceso, contribuyendo a satisfacer esta conducta natural y la limpieza del animal, así como reducen la frustración o el estrés, debido al aburrimiento de animales que se encuentran en alguna condición de estabulación.
Las vacas tienen el instinto de lamer y dejarse lamer por sus pares. Ese es un comportamiento normal. Todos los animales en un grupo son lamidos, pero no todos lamen. Animales de rango similar se lamen entre sí más de lo que lo hace con animales de distinto rango. Este comportamiento se asocia a cambios de actividades, como por ejemplo, antes o después de ir a descansar. El lamerse parece calmarlos después de un disturbio. Los animales necesitan de este acicalamiento social. Si no puede ocurrir porque el animal está atado por ejemplo, en cuanto tenga la posibilidad de hacerlo, lo hará de manera reiterada.
A las vacas les gusta frotar su cuerpo contra un cepillo. Los cepillos para animales mejoran el bienestar animal porque aumentan la circulación sanguínea, los mantiene limpios, ocupados y tranquilos. Si los animales no cuentan con un cepillo, se frotarán contra las barandas de alimentación, bebederos, muros o cubículos, lo cual no es deseable porque pueden lastimarse o dañar las instalaciones.
Estudios realizados con distintos modelos de cepillos para vacas muestran que estos fueron utilizados por casi todas las vacas en un grupo. La utilización menor en los peores días es de un 85% y en los mejores días de 100% de la animales en grupo. Los animales frecuentan el cepillo entre tres a seis veces al día, totalizando unos 10 minutos por animal.
Cuando las vacas no cuentan con cepillos, la mayoría de ellas prefiere rascarse principalmente la zona de la cabeza y el cuello contra objetos inanimados u árboles. La investigación ha demostrado que al tener cepillos giratorios para vacas, se mantiene la preferencia por rascar las zonas de la cabeza y cuello, pero adicionalmente se ha notado una mejor distribución en el rascarse de las vacas, permitiéndoles acceder a la parte de la espalda y cola, logrando mayor aseo y bienestar.
Distintos estudios han mostrado que se aumenta la frecuencia con que se rascan el cuello, espalda y cola, demostrando que el uso del cepillo mecánico para vacas, facilita el asearse, especialmente en estos lugares de difícil acceso para la vaca.
Signos de Placer:
- Estiramiento de la parte que se está rascando
- Levanta la cola levemente
- Ojos entrecerrados
Actualmente en Europa se está postulando que a nivel de rebaño, el uso del cepillo podría ser un indicador del bienestar general y podría ser utilizado como benchmark entre los rebaños. Ya que el cepillado puede considerarse comportamiento de lujo, es probablemente uno de los primeros comportamientos a disminuir si el bienestar de la vaca comienza a ser reducido, por lo tanto podría ser un buen indicador del estado de bienestar de los animales en un rebaño.
Beneficio 2: Aumento de la producción de leche
Un estudio de campo llevado a cabo en la Universidad de Cornell, Nueva York, USA. publicado el año 2010 demostró que vacas de segundo parto mostraron un incremento significativo en la producción de leche después de la instalación de los cepillos para vacas en los corrales de estabulación. El aumento medio de producción estabilizado a los 6 meses de uso del cepillo, fue de 1 kg de leche/vaca/día.
Las hipótesis propuestas para esta correlación positiva son que las vacas que van al cepillo a rascarse se muestran más activas, y por lo tanto más proclives a frecuentar el comedero. Las vacas más activas también utilizarían las cetonas más eficientemente y podrían experimentar menor reducción en la ingesta de alimentos debido a una alta concentración de cetonas en el suero. Esto conduciría a un aumento potencial en el rendimiento diario de la leche. Por otra parte, el hecho de que los cepillos aumentan la circulación de sangre en todo el cuerpo de la vaca, aumenta también el flujo de sangre hacia la ubre, lo que aumentaría la tasa de intercambio de nutrientes, aumentando la producción de leche.
Nuevas investigaciones publicadas el año 2016 por la Universidad sueca de Ciencias Agrícolas, encontraron una relación positiva entre la frecuencia de uso de los cepillos, la producción de leche y el consumo de materia seca. Cada uso adicional de cepillo se asoció con un mayor rendimiento de leche de 1,52 kg y un mayor consumo de 0,67 kg de materia seca al día. Adicionalmente encontraron un incremento en el flujo de leche asociado a una mayor frecuencia de uso del cepillo, describiendo que por cada visita adicional al cepillo se obtuvo un incremento de 0,05 kg/minuto.
De acuerdo a los autores, será interesante en futuros estudios probar la hipótesis de que el uso creciente del cepillo provoca un aumento de la producción de leche mediante la estimulación táctil del cepillo, provocando un aumento de la liberación de oxitocina y que el aumento en la alimentación es una consecuencia del aumento producción de leche. El hecho de que encontraran una relación entre el uso del cepillo y el flujo de leche tendería a apoyar que la oxitocina sería el driver de este mecanismo.
Beneficio 3: Disminución de la incidencia de enfermedades
En el estudio de la Universidad de Cornell, también se evaluó la presencia de cepillos para vacas y su rol en la presentación de mastitis clínica en el rebaño, demostrando una disminución en la presentación de mastitis clínica en vacas de dos o más lactancias. Los datos sobre mastitis clínica fueron recopilados antes y durante el estudio. No hubo diferencias antes de la instalación de los cepillos para vacas en los distintos grupos de animales, sin embargo, luego de la implementación de los cepillos se observó una caída marcada y significativa de 34% en la incidencia de mastitis clínica en vacas de dos o más partos. La diferencia en la incidencia de mastitis se vio aumentada al aumentar el número ordinal de lactancias.
Distintos estudios han mostrado la relación entre el grado de limpieza de la vaca y la incidencia de mastitis. Las hipótesis planteadas para estos resultados pueden ser que la vaca puede asearse en zonas como la cola o muslos al utilizar el cepillo, disminuyendo indirectamente la exposición de la glándula mamaria, debido a una reducción general de la suciedad sobre la vaca, a pesar que en ningún momento el cepillo toca directamente la glándula mamaria. Otras teorías están relacionadas a la mejora en el nivel inmunitario de los animales debido a un menor nivel de estrés e vacas que tienen acceso a este tipo de cepillos.
Otra razón sugerida para el uso de los cepillos para vacas, está en la disminución de parásitos externos presentes en el pelo y piel de los animales.
Beneficio 4: Mantener las vacas frescas
Durante la época de mayores temperaturas, y debido a los efectos del estrés calórico sobre los niveles de producción de leche, parámetros reproductivos y eficiencia de conversión de alimento, hoy se recomienda la implementación de sistemas de ventilación y aspersión de agua sobre los animales. Para que estos sistemas operen a máxima eficiencia necesitamos que la superficie del animal este los más limpia posible para facilitar la disipación de calor. Si las vacas tienen sobre su piel diversos materiales como polvo, pelos sueltos, material de cama, purines, etc. encima de su cuerpo pueden crear una capa impermeable que dificulta la disipación de calor y la evaporación de agua, dificultando las medidas de mitigación para abatir el estrés calórico.
Recomendaciones prácticas al instalar los cepillos
Espacio
Se necesitan tres a cuatro metros libres alrededor de los cepillos para vacas, para reducir amontonamientos y permitir un adecuado flujo en el tránsito de los animales. La altura del cepillo dependerá del tamaño de las vacas. Medir y calcular la altura media del rebaño (distancia X). La distancia Y indica la altura de la instalación del cepillo para vacas y es igual a la parte inferior del bastidor de montaje (ilustración).
Numero de cepillos por grupo de animales
Los cepillos para vacas son recomendables para sistemas de estabulación libre, Drylot o corrales y para sistemas de producción en base a pastoreo que cuenten con plataformas suplementarias de alimentación, y/o áreas del campo donde permanezcan los animales confinados temporalmente. Debe considerarse un cepillo por cada 50 a 60 vacas en producción, con esto se asegura un tiempo para cada animal, permitiendo que los de menor jerarquía también tengan la oportunidad de asearse y rascarse.
Tiempo de adaptación
Distintos estudios y observaciones en terreno han demostrado que luego de la instalación de un cepillo mecánico para vacas, alrededor de entre un 50 a 70% de los animales usaron el cepillo mecánico durante el primer día, y al cabo de una semana todos los animales ya lo han usado.
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